Las neveras son electrodomésticos pesados y delicados, por lo que es importante transportarlas de forma segura para evitar que se dañen. En este artículo, te explicamos cómo hacerlo paso a paso.
Vacía la nevera
Antes de empezar a mover la nevera, es importante vaciarla por completo. Retira todos los alimentos, bebidas y otros objetos que estén dentro. También debes retirar los estantes, bandejas y demás partes móviles.
Prepara la nevera
Una vez que la nevera esté vacía, puedes empezar a prepararla para el transporte. Para ello, debes:
- Cubrir las juntas de las puertas con cinta adhesiva para evitar que se dañen.
- Colocar la nevera en posición vertical.
- Envolver la nevera con una manta o una sábana para protegerla de golpes y arañazos.
Transporta la nevera
Para transportar la nevera, puedes utilizar una carretilla de mudanza o un carro de mano. Si no tienes ninguna de estas herramientas, puedes pedir ayuda a un amigo o familiar.
- Coloca la nevera en la carretilla o el carro de mano con cuidado.
- Evita inclinar la nevera más de 45 grados.
- Si tienes que subir la nevera por escaleras, hazlo con cuidado y despacio.
Coloca la nevera en su lugar
Una vez que hayas llegado a tu destino, coloca la nevera en su lugar y déjala reposar durante al menos 24 horas antes de conectarla a la corriente eléctrica.
Consejos adicionales
- Si vas a transportar la nevera en un vehículo, asegúrate de que esté bien sujeta para evitar que se mueva.
- Si tienes que transportar la nevera en una distancia larga, es recomendable contratar a una empresa de mudanzas profesional.
Seguridad
Es importante tener en cuenta las siguientes medidas de seguridad al transportar una nevera:
- Usa guantes y calzado adecuado para protegerte de golpes y caídas.
- No inclines la nevera más de 45 grados.
- No transportes la nevera en un vehículo si no está bien sujeta.
Conclusiones
Siguiendo estos sencillos consejos, podrás transportar tu nevera de forma segura y sin dañarla.